26 dic 2011

Un día como otro cualquiera

Cuando me he levantado esta mañana, no recordaba que fuera el día de Navidad.
Ya sabéis todos que ha sido un año algo extraño y no tengo la agenda actualizada. De hecho, no me he dado cuenta de que hoy era un día diferente hasta que, camino del bar, he visto que el kiosko estaba cerrado y que la calle no olía a pan fresco de primera hora como cada día cuando voy camino del mercado.
No he sido consciente de que era Navidad hasta que, al pasar junto a la última casa habitada del final de la calle, he oído a unos niños gritar alborotados. En ese momento, en mi cerebro se han unido todas las piezas: no hay periódicos, no hay pan y los niños abren regalos, y lo he entendido.

Había llegado a pensar que era el único habitante de una ciudad fantasma después de la aniquilación de la raza humana por algún potente virus... Aún así, pensando primero en salvar la especie y corroborando después que era una persona muy triste por no saber que hoy era navidad, aquí estoy, abriendo las puertas del bar, por si algún presunto salvardor del mundo más no sabe qué día es hoy y decide tomarse aquí su cerveza tranquilamente mientras reflexiona sobre qué haría si realmente fuera el último superviviente de la raza humana.



18 dic 2011

¿Qué somos?

...lo que hace que estemos muy cabreados.

Claro que estamos cabreados, yo lo noto cada día en las conversaciones que escucho a medias, quejas apenas murmuradas porque ya no nos atrevemos a gritarlas. Hay demasiadas paredes a nuestro alrededor que amortiguan nuestros gritos y hemos dejado de esforzarnos.
Nadie se atreve a levantar demasiado la voz, según están las cosas... bastante tienes con lo que "tienes". Frases como éstas son las que pesan como losas en nuestra conciencia y ya no creemos tener derecho a quejarnos... ¿por qué he de conformarme?

Me produce mucha tricteza ver tanto talendo desperdiciado, tanto potencial humano que nadie quiere aprovechar.
Estoy pensando en crear un espacio en el bar para que cada uno exprese su frustración y sus quejas; algo así como un saco de boxeo para que podamos soltar la adrenalina que nos sobra y que no es bueno que se quede dentro.
¡¡Cambio puñetazos por arte!!
¿Qué os parece?

12 dic 2011

Llueve en silencio, que esta lluvia es muda...


Llueve en silencio, que esta lluvia es muda
y no hace ruido sino con sosiego.
El cielo duerme. Cuando el alma es viuda
de algo que ignora, el sentimiento es ciego.
Llueve. De mí (de este que soy) reniego...

Tan dulce es esta lluvia de escuchar
(no parece de nubes) que parece
que no es lluvia, mas sólo un susurrar
que a sí mismo se olvida cuando crece.
Llueve. Nada apetece...

No pasa el viento, cielo no hay que sienta.
Llueve lejana e indistintamente,
como una cosa cierta que nos mienta,
como un deseo grande que nos miente.
Llueve. Nada en mí siente...
 
_Fernando Pessoa_Versión de Ángel Crespo